Hay muchas maneras de ser solidario…
Lo de ser donantes de órganos hace ya la friolera de 35 años que lo soy, recuerdo que por entonces tenias que presentar dos testigos mayores de edad, por si acaso, uno fue la que ahora es mi esposa y el otro mi mejor amigo, nos conocimos en “la escuela de cagones” que era como se les llamaba entonces a las guarderías y ya hemos pasado ambos del medio siglo, a que no habíais visto un carnet de donante en cartulina escrito a maquina de escribir con un numero tan bajo…?
Pero hay muchas maneras mas de echar una mano, yo soy agnóstico, todo lo que huela a cura, monja, pastores evangelistas o lo que sea me produce repulsión, pero hay que reconocer que esa panda de solteronas vestidas de negro o esos del alabado sea el Señor, bendiciones, cánticos y palmas entre gitanos están sacando a mucha gente de la droga, ayudan a niños desfavorecidos en horfanatos, etc.
Con que te guste el fútbol, organizar juegos o dibujar es suficiente para irte a una casa de acogida a entretener a los niños,yo lo hacia en Estremoz (Portugal) y poco a poco aprendí el idioma, otras veces en la Santa Casa de Misericordia de Prelada (Oporto) cuando terminaba de trabajar me montaba en una furgo e iba ayudando a subir, bajar, ponerse los abrigos, limpiar mocos, insistir para que se comiesen las galletas que nos daban para ellos o lo que hiciese falta a niños con Síndrome de Down sin recursos
Puedes hacer muchas cosas en muchos sitios, no se trata de hacer cosas importantes, todo suma y cualquier ayuda cuando no hay nada es bien recibida.
No hagas caso a tus prejuicios, solo intenta ayudar, es muy fácil, todos somos mas solidarios de lo que pensamos a pesar de que como a mi todo lo religioso me produzca “alergia”
Un día organice un grupo de trabajo con amigos de lo mas variopinto, un estudiante de topografía, un rejoneador, un ingeniero nuclear, un jubilado que criaba canarios, un empresario informático… y yo que era el mas tonto de todos pero que tenia conocimientos de horticultura…
En lugar de quedarnos en la cama zanganeando los domingos nos levantábamos temprano, quedábamos para desayunar y nos íbamos al Asilo de Ancianos, si el de las pinguinas egoistas y aprovechadas con menos detalles que el salpicadero de un panda.
Yo mas o menos hacia de manigero y decía que es lo que tocaba cada domingo pero nos metimos en el fregao de hacer una huerta ecológica de 2000 metros, no me he equivocado, 2000 metros para que los abueletes pudieran comer verduras buenas.
Pues eso, gimnasio gratis y a doblar el lomo gratis en beneficio de los abueletes…
La verdad es que las tías lo flipaban y mas de una vez las pillábamos mirándonos con ojos poco “castos”
Mirad que montón de patatas se intuian ahiídebajo porque como dice el refrán “donde hay mata, hay patata”
Terminábamos deslomados, pero siempre nos íbamos contentos y satisfechos.
Sobre todo cuando tocaba la recolección y llenábamos las cámaras frigoríficas de buenos y saludables alimentos
Después quien pagaba el pato eran las abuelas que estaban mas espabiladas porque las ponían de “pinches” de cocina y ellas felices de sentirse útiles.
Cuando tocaba recoger lechugas, pues lechugas a lo bruto…
Esas fotos eran de “postureo” porque las monjas chapaban menos de lo que parecía, tenían empleados y voluntarios gilipollas como nosotros que les sacábamos las castañas del fuego mientras ponían los altavoces a todo volumen en la zona que daba al huerto con los rezos esos del "Dios te salve Maria, patatín, patatán… y si llegaba el alcalde para regalarles un lavavajillas, aparecía misteriosamente un periodista, la madre superiora y al día siguiente salian ambos en el periódico, que buenas y que pobres eran las monjitas y que bueno que era el alcalde que con dinero de otros “postureaba” gratis…
Pero como os podeis imaginar, ni puto caso, nosotros íbamos a nuestro rollo, a producir verduras para los abuelos como unos campeones hasta que el resto de colegas se dio cuenta de lo que os estoy contando y al final el grupo se disolvió, yo seguí algún tiempo mas en la zona de los hombres enseñándoles a jugar al ajedrez en un ordenador viejo que tenia y les instale para ellos…
Por tanto os invito a que echeis una mano en lo que podais sin hacer caso a vuestros prejuicios en donde os de la gana, hay muchos sitios donde un poco es mucho.