Este es uno de los jabones fabricados por los artesanos Eric y Samantha McDaniels en su pequeño taller de Fort George (Maryland). Está hecho a mano en pequeños lotes con ingredientes de primerísima calidad en unión de otros no convencionales, lo cual le da un enfoque innovador a la espuma de afeitar.
El nombre de Kraken supongo que vendrá porque sea un gran aficionado a la saga de Piratas del Caribe porque no le encuentro ninguna relación con el jabón.
Formulación/ingredientes: En la foto los veis.
A destacar:
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Aloe Vera: Poco vamos a descubrir de este ingrediente. Es antiséptico, antiinflamatorio y regenerador.
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Leche de Coco: Es curioso este ingrediente porque apenas es utilizado y tiene una propiedades espectaculares. Es rica en selenio y magnesio, cuya combinación la convierte en un potente antioxidante y además regula la velocidad de regeneración celular.
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Manteca de Karite: De alta acción hidratante y cicatrizante.
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Ultramarine Powder: Es decir, Azul de Ultramar. Es simplemente un pigmento (el que le da las tonalidades azules al jabón. Se usa en tan pequeña cantidad que no aporta ninguna propiedad al jabón.
Son pocos ingredientes lo cual es buena señal, porque ya después de este tiempo que llevo probando jabones, la experiencia me dice que cuanto menos ingredientes mejor. Hay que destacar que este jabón lleva lanolina y sebo, por lo tanto absténganse los veganos.
Presentación: Muy buena. Son 100 gramos de jabón duro (pero no de triple prensado) que vienen dentro de un envase de plástico sólido y de gran calidad, con tapa a rosca. Además el diámetro del recipiente es de 9,5 cm. Lo cual facilita muchísimo la carga.
Longevidad/duración: Normal. Se gastan de media 1,2 gramos por afeitado, lo que nos da para 83 afeitados.
Carga requerida: Poca y muy rápida. Dejando en remojo un minuto el jabón, escurrimos y en 10 segundos
tenemos la carga.
Capacidad de hacer espuma: Muy alta. Dentro de los jabones americanos que he probado, este es de los más generosos a la hora de producir espuma.
Este es el resultado de la primera batida con el agua que retiene la brocha escurrida.
Tras añadir unas 10 gotas de agua.
Tras añadir otras 10 gotas de agua ya está lista la espuma (en el suribachi hay más del doble de lo que se observa en la brocha).
Ratio agua/jabón: Admite agua sin problemas, pero añadiéndola poco a poco.
Calidad de la espuma: Excelente. Es mayonesa pura y extremadamente pegajosa…
Protección y deslizamiento de la hoja: Excelente. Se nota la presencia de la lanolina y el sebo que hacen que la maquinilla “patine” por la cara.
Sensación en la cara: Totalmente neutra. Ni picores, ni frio ni calor.
Hidratación y postafeitado: Muy buenos ambos aspectos. Se nota que lleva manteca de karité a raudales, lo cual unido a la lanolina aporta una hidratación y eslasticidad a la piel sobresaliente.
Aroma: El artesano dice que es el aroma que a uno se le viene a la mente cuando piensa en el aroma
“barbershop”. Bueno pues yo estoy en total desacuerdo. Huele a limpio pero no del tipo jabón clásico, huele a suavizante (OJO que no a detergente), al Vernel Azul de toda la vida, que no se a vosotros, pero a mi me encanta.
Precio: 12€ en su web. http://mickeyleesoapworks.com/shop/
Precio por afeitado: 0,14€.
Recomendado: SI sin duda alguna. Si no este aroma algún otro que os atraiga más, pero os puedo asegurar que es un jabón de una calidad excepcional a un precio contenido.