Estas navidades estuve en Lietor, uno de los pueblos donde se rodó Amanece que no es poco, de hecho tiene una Ruta Amanece que no es poco. Muchos de los del pueblo hicieron de extras, al final del rodaje se proyectó la película en la plaza del pueblo y la gente se fue de la proyección muy cabreada, pensaban que se reía de ellos, siempre tan surrealista y a muchas veces incomprendido.
Por cierto, ahí van 15 frases de pelis de Cuerda. Publicado por ‘El Español’ (ya me sabe mal, pero no he conseguido pegar el enlace. Torpe que es uno)
“¡Alcalde: todos somos contingentes, pero tú eres necesario!”
“"¡Se me está muriendo divinamente, te lo juro! De los años que llevo de médico nunca había visto a nadie morirse tan bien como se está muriendo tu padre. Qué irse, qué apagarse, con qué parsimonia. Estoy disfrutando que no te lo puedes ni imaginar".
“Eres minoría étnica”. “Bueno, minoría étnica y negro como un tizón”.
“Calabaza, yo te llevo en el corazón”.
“Déjate, déjate, que un hombre en la cama siempre es un hombre en la cama ¿eh?”.
“Yo es que he pensado que a mí también me gustaría ser intelectual, como no tengo nada que perder”.
“Oye, tu hijo es muy negro”. “Pues si ves por las ingles…”.
“Y ahora, para rematar, me dicen estos amigos que ha escrito usted ‘Luz de agosto’, la novela de Faulkner, ¡de William Faulkner! y ¿no podía usted haber plagiado a otro? ¿es que no sabe que en este pueblo es verdadera devoción lo que hay por Faulkner?".
“¿Vamos a elegir nosotras al tonto del pueblo? Es que mi hermano ya está harto”. “No, no. Esta vez no. Es un embolao que nos metían los hombres porque decían que nosotras tenemos más sensibilidad y distinguimos mejor al tonto que podría darnos más juego. Pero este año eligen ellos, que bastante tenemos nosotras con lo nuestro”.
“Trae algo de Góngora, que tengo yo cuerpo de Góngora…”.
“También ha salido que los de la invasión se tienen que ir”.
“Aquí no hay ni Dios. ¿O es que todos son aquí unos hijos de puta? Porque pueden ser unos hijos de puta que se hacen pasar por fantasmas”
Lo de dar guantazos es un esquema muy sintético que conviene utilizar poco, y utilizarlo bien. Casi en plan poético, diría yo. ¡Zas-zas! Como algo prodigioso. ¿Tú me entiendes?
Pues yo creo que me voy a sacar la chorra.
“-¡Buenas noches!. -¡Que quería yo hablarle de Dostoievski! -Ah, pues muy bien, encantada. Ahora mismo bajo”.