Pues la cosa es que tengo una sencilla Omega S-Brush sintética que funciona muy bien pero tiene un mango malísimo de plástico ultraligero, como dicho mango puede desarmarse ± por la mitad, he tomado una iniciativa algo bruta, quizá, pero muy expeditiva: rellenar con pequeñas puntas (clavos sin cabeza) ambas partes y rematarlo con un chorretón de cola de contacto, más que nada para que todo quede fijo y no se convierta en un fucking sonajero o maraca. De hecho el mango sigue siendo desmontable.
Resultado: ha pasado de ser Manny Pacquiao a Evander Holyfield
Ya os diré en cuanto la use
En todo caso ha sido divertido, y para estos cutre experimentos, nada mejor que una sencilla brocha de 6 pavos …
Finalmente el invento de hacerle ganar peso a la ligera Omega S-Brush se fué al carajo y terminó todo en la basura. El motivo es que la cola de contacto usada para fijar el contrapeso (puntas-clavo sin cabeza) ha fundido el plástico de la brocha quedando todo como una masa deforme y elástica; no importa demasiado porque era una brocha de seis pavos … En cualquier caso ha sido un error de libro del cual debo aprender: hay que ir muy al tanto con algunos adhesivos al aplicarlos en según que tipo de materiales plásticos …