Hace unos dias Jovino utilizó una Henckels antigua que le regalé hace tiempo y lo publicó en afeitados del día.
He tenido muchas navajas alemanas pero las Henckels antiguas de acero al carbono tienen su puntillo.
He rebuscado por el cajón de los trastos porque sabía que tenía una sin restaurar.
A la hora de comer la pobre estaba oxidada por ambos lados, con una sonrisa invertida de tantos años de trabajo, las cachas metálicas estaban muy arañadas, los pines flojos, en fin, un auténtico desastre.
Como soy así de envidioso me propuse preparar una navaja como la de Jovino para afeitarme a la hora de la merienda.
Ufff, menuda currada…
Empecé planificando el filo para quitar la sonrisa y de paso matarle el filo para su posterior manipulación.
Tras una limpieza profunda y desinfección comencé a quitar a mano el óxido de la hoja por ambos lados con lijas de 1500 y 2000 dando pases cruzados y sin apretar para no dejar muchos arañazos.
Tras ello con lija 2000 a mano he quitado arañazos del aluminio de las cachas
Después con un disco de fieltro un buen pulido con pasta azul y pasta blanca.
Que ganas tenía de verla limpia para comenzar el afilado haciendo el bisel con una piedra de 1000, afilado con belga azul, pulido con belga amarilla y finalización a espejo con naniwa 12000
Tras ello unas buenas pasadas en tres asentadores con cuero ruso, vaquetilla muy fina y cordoban.
Esta es la foto que he subido hace un rato en “afeitados del día”
La navaja ha quedado soberbia y me ha dado un afeitado como los que daba a los clientes de una barbería extremeña en sus mejores tiempos.
Espero no haberos aburrido mucho, perdonad el ladrillo